Abultamiento de Disco Después de una Lesión

Abultamiento de Disco Después de una Lesión: Lo Que Debes Saber
Un abultamiento de disco puede ser una lesión dolorosa y que cambia la vida, especialmente cuando ocurre después de un accidente de auto, una caída o un incidente laboral. En Anderson Franco Law, ayudamos a personas en toda California, incluyendo San Francisco, que sufren lesiones en la columna vertebral tras accidentes. En esta publicación, explicamos qué es un abultamiento de disco, cómo ocurre y cuáles son tus opciones legales si fue causado por la negligencia de otra persona.
¿Qué es un Abultamiento de Disco?
Tu columna vertebral está formada por huesos llamados vértebras, y entre cada vértebra hay un disco. Estos discos actúan como cojines o amortiguadores. Cuando un disco está sano, evita que los huesos se froten entre sí. Pero cuando la capa exterior del disco se debilita, la parte blanda interna puede sobresalir. A esto se le llama abultamiento de disco.
Un abultamiento de disco es diferente a una hernia discal. En un abultamiento, el disco no se rompe, pero sobresale más de lo normal. Esto puede presionar los nervios cercanos a la columna y causar dolor, entumecimiento u hormigueo.
Cómo Ocurren los Abultamientos de Disco en un Accidente
Los abultamientos de disco comúnmente son causados por traumas o esfuerzos físicos. En muchos casos de lesiones, el trauma ocurre por un evento repentino como:
- Un accidente de auto
- Una caída
- Un accidente laboral
- Una lesión deportiva
Cuando tu cuerpo se sacude o gira de manera violenta —como durante una colisión— la columna puede absorber gran parte de la fuerza. Esa presión puede dañar un disco, incluso si no hay fracturas. A veces, el abultamiento no se nota de inmediato. El dolor puede aparecer días o semanas después, a medida que aumenta la inflamación.
Síntomas Comunes de un Abultamiento de Disco
No todos los abultamientos causan dolor, pero cuando lo hacen, los síntomas pueden afectar seriamente tu vida diaria. Los síntomas más comunes incluyen:
- Dolor agudo o ardiente en el cuello, espalda, brazos o piernas
- Entumecimiento u hormigueo en manos o pies
- Debilidad muscular
- Dificultad para sentarse, caminar o levantar objetos
En casos graves, las personas pueden perder el control de la vejiga o los intestinos. Eso es una emergencia médica que requiere atención inmediata.
Cómo se Diagnostica un Abultamiento de Disco
Los médicos suelen usar herramientas de imagen como una resonancia magnética (MRI) o una tomografía computarizada (CT scan) para diagnosticar un abultamiento de disco. Estas pruebas muestran el estado de la columna y si el disco está presionando algún nervio. También pueden hacerte un examen físico para evaluar reflejos, fuerza y rango de movimiento.
Incluso si una radiografía parece normal, eso no significa que la columna esté bien. Las radiografías no muestran los tejidos blandos como discos o nervios. Por eso las resonancias magnéticas son tan importantes después de una lesión.
Opciones de Tratamiento Después de una Lesión de Disco
El tratamiento depende de la gravedad del abultamiento. Algunas personas se recuperan con cuidados básicos, mientras que otras necesitan tratamientos más avanzados. Los médicos suelen empezar con:
- Reposo y terapia física
- Medicamentos para el dolor
- Relajantes musculares
- Inyecciones de esteroides epidurales
Si estos tratamientos no funcionan, puede ser necesario realizar una cirugía. Una cirugía común para discos dañados es la discectomía, en la que se extrae parte del disco. En algunos casos, se reemplaza el disco completo con uno artificial o se realiza una fusión espinal.
La recuperación puede tardar semanas o meses, y es posible que debas ausentarte del trabajo, lo cual puede afectar tus ingresos.